Una feria para maestros

El certamen de Gera, pese al descenso del volumen de negocio, sigue atrayendo a gran cantidad de visitantes

Ganado y público, ayer en la feria de Gera. Pepe Rodríguez.

Gera (Tineo),

Ya no van profesores, pero la feria de Gera, en Tineo, sigue siendo para maestros. Así, «Feria de los Maestros», se denominaba el certamen ganadero de localidad porque muchos pueblos del concejo de Tineo contrataban a los maestros de temporada. «Maestros babianos» se llamaban por su inicial procedencia de la región leonesa de la Babia, aunque en otras zonas del municipio se les conocía por «maestros lazariegos». Estos se presentaban en un círculo en un extremo de la Feria de Gera y, según dicen, vistiendo traje de pana, bota alta, polainas y llevando en la cabeza una especie de gorro cónico rematado en un pompón colgante.


Este hecho da buena muestra de lo realmente trascendente que era para la zona esta fecha, este acontecimiento, pues movilizaba a miles de cabezas de ganado durante los varios días que duraba, y fue considerada, durante buena parte de finales del siglo XIX y principios del XX, como la mejor del Norte de España, pues a ella llegaban con sus reses ganaderos no sólo de Asturias, sino también de Galicia y Castilla-León y compradores del País Vasco, Cantabria o Valencia, y casi de cualquier parte de toda España, atraidos por la calidad del ganado de la comarca.


Ahora ya no hay profesores, pero sí maestros ganaderos, que lidian como pueden la crisis económica, que se ceba especialmente en los sectores agrario y ganadero. El público sí acudió en buen número, atraído además por la exposición de maquinaria agrícola, que servía de apoyo a la clásica muestra y venta de ganado de toda la comarca suroccidental. Así, mientras la delicada situación económica no deja de azotar y el negocio no acaba de levantar el vuelo, por lo que estos mercados no manejan los precios y volúmenes de venta de antaño, todas las ferias del concejo de Tineo han visto cómo aumentaba su popularidad en años recientes. Desde la de San José a la de San Francisco o la de Gera se mantiene en esta misma senda de continuo crecimiento para recuperar la importancia perdida.